El Parque Natural de Sierras Alhma, Almijara y Tejeda fue declarado mediante el Decreto 191/1999, de 21 de septiembre, de la Junta de Andalucía.
La singularidad más manifiesta del Parque, radica en la geología del macizo montañoso que conforman las Sierras de Alhama, Almijara y Tejeda. Esta alineación alpina con dirección Este-Oeste está formada principalmente por el apilamiento de materiales de composición carbonatada: mármoles y dolomias. El paisaje adquiere gran valor por el característico modelado en crestas y profundos valles que han permitido la preservación de comunidades vegetales relícticas. La necesidad de adaptación a las exigentes condiciones de los suelos dolomíticos se ha traducido en una importante presencia de numerosos endemismos Malacitanos-Almijarienses, exclusivos del Parque.
La fauna está bien representa, especialmente las aves rapaces y entre los mamíferos destaca la Cabra montés.