• Azor juvenil en bebedero de verano.
• El moteado del pecho lo identifica como un pollo nacido esta primavera.

Unos 50 cm los machos y 60 cm de longitud total las hembras.

Las hembras son sensiblemente mayores que los machos, como en otras muchas rapaces.

El plumaje de los adultos es gris, con dorso uniforme y zonas inferiores finamente barradas en gris parduzco. Muestran lista superciliar (ceja) blanca, e infracobertoras caudales del mismo color.

Las alas son redondeadas, más bien cortas, y la cola larga, características que le ayudan a obtener una gran maniobrabilidad en espacios cortos.

El azor es quizá la rapaz más forestal, capaz de moverse y cazar en los bosques más espesos.

Todo el hemisferio norte, excepto las zonas desérticas, estepas y tundras. Exclusivo de zonas con cierta cobertura arbórea.

En Europa llega hasta Escandinavia.

En la Península Ibérica es sedentario en todas las zonas favorables. Durante la migración otoñal y primaveral se pueden ver cruzando el estrecho abundantes ejemplares que deben pertenecer a las poblaciones noreuropeas.

Bosques, fundamentalmente de coníferas, donde suele nidificar, si bien frecuenta bosques caducifolios e incluso encinares.

Nidifica en coníferas reutilizando un nido viejo de corneja o construyendo un nido propio.

Caza pájaros de mediano tamaño, de mirlo en adelante, palomas, y córvidos, así como conejos, ardillas y liebres. Fundamentalmente en los claros de los bosques.

El azor es ave difícil de ver por su rapidez, raramente podremos tener la ocasión de distinguir bien su morfología de alas cortas y larga cola cuando en primavera podamos verle remontar y hacer vuelos circulares sobre su territorio.

Al parecer su caza se basa en el acecho manteniéndose camuflado en los bordes de bosque y gusta de posarse en árboles secos que le sirven de atalaya desde donde domina un territorio a la espera de que aparezca una presa. (Observación personal en Almijara).

Repartido por toda la provincia. Siempre escaso.

Avistado en Sª de Castril y la Sagra, Sierra Nevada, Sierra de Huétor, Sª de Almijara y Alhama, Sierra de Lújar, etc.

Protegido, en peligro.

No globalmente amenazado. CITES II.

Su capacidad para adaptarse a la domesticación y su agresividad ha hecho de esta especie un ave muy cotizada para su uso en cetrería.

Peterson, Mountfort, Hollom. Ed. Omega.