El ave más pequeña de nuestra fauna, el reyezuelo tiene unos 9 cm de longitud.

El plumaje es muy claro en la zona ventral y verde oliváceo en el dorso con plumas del ala verdosas y doble franja alar en las supracobertoras alares. "Hombros" verde amarillento, más claro que el resto del dorso.

Cabeza redondeada, con pico negro muy fino, ojo grande y negro, franja superciliar blanca conspicua y lista ocular negra. La cresta anaranjada en el píleo es visible y solo la levanta en momentos de display de celo.

Cola corta y escotada, verdosa.

Europa occidental, excepto Escandinavia, llegando hasta Turquía y el Norte de África.

En la Península Ibérica falta en el Valle del Ebro, zonas de Levante y Andalucía Occidental. Está presente en las provincias costeras desde Cádiz a Granada.

Migrador parcial, desciende en altitud y hacia el sur durante el invierno.

Pueden morir muchos de frío durante inviernos crudos a causa de su pequeño tamaño que los hace muy vulnerables al frío.

Fundamentalmente en coníferas en zonas de montaña, así como en zonas de arbolado planifolio, matorrales, trepadoras, etc.

En invierno puede frecuentar parques urbanos mostrándose confiado en la presencia humana.

Inquieto, no deja de moverse de una ramita a otra sin descanso.

En pleno invierno mantiene una actividad febril, sin dejar de buscar invertebrados en las ramas finas de pinos, encinas o matorrales altos. Muy a menudo vaga en bandos invernales en compañía de páridos.

Frecuentemente en parejas, incluso en invierno.

Canto silbante " siisiisiisiisii". Reclamo corto "sit sit" característico, que repite a menudo mientras salta entre ramas.

Fabrican un delicado nido tejido con telas de araña, musgos, líquenes y plumas colgado entre dos ramitas, frecuentemente en la espesura de plantas trepadoras.

Frecuentemente cría dos polladas consecutivas en primavera.

Se alimenta de pequeños invertebrados y sus larvas que busca en las ramitas y bajo las hojas.