Un rincón y tinao de Capileira.

Los tinaos son uno de los elementos arquitectónicos mas característicos de los pueblos alpujarreños. Es la manera de plasmar la relación de intercambio y estilo de vida de sus habitantes que se extendía fuera de las viviendas.Se han descrito como una plataforma que recubre total o parcialmente la calle, con una o dos plantas, prolongando la edificación. 

Las funciones de los tinaos son variadas, pudiendo servir de zona de paso y detención, protección de acceso a la vivienda o lugar de estancia con buen tiempo. Los tinaos cubiertos, además de estos tendrán los de secado de frutos o almacén. 

Capileira, a 1436 m. de altitud, hace honor a su nombre. " Cabellera" coronada por las altas cumbres de Sierra Nevada, con el pico Veleta a sus espaldas, el pueblo se extiende sobre la vertiente este y parece caer cuesta abajo por el barranco. Es la más cercana de toda la comarca a las cumbres del Mulhacen y el Veleta, a cuyas faldas es posible subir en vehículo en verano, con el pertinente permiso de Medio Ambiente, con el Servicio de Altas Cumbres. 

Visitar Capileira, es adentrarse en su imbricada geografía y pasear sin prisa. Conocer los tres barrios que la forman, bajo-medio y alto, que corresponden al desarrollo histórico del pueblo.

El más antiguo es el barrio bajo, origen musulmán del pueblo creado en torno a la Plaza Hondera o Plaza Vieja, a través de calles de evocadores nombres como Silencio, Vicario, Cerezo o Moral, en donde todavía son visibles los cimientos de la antigua mezquita. Es el barrio que ha conservado mejor la estructura y el estilo arquitectónico tradicional alpujarreño, con sus calles estrechas y empinadas, adarves y tinaos pintorescos, de fotografía. Visita es también el popular horno de Luisa, panadería de reminiscencias moriscas, que ofrece un pan natural hecho a fuego de leña y unas buenas tortas. 

El barrio medio se ha desarrollado a partir del siglo XVIII, en torno a una nueva iglesia, construida en 1760. La parroquia de Capileria alberga la talla de una Virgen de la Cabeza que no es morena, donada por los Reyes Católicos. Cuenta con un museo dedicado a Pedro Antonio de Alarcón, con colección de cerámica, litografías, imágenes religiosas, viejos retablos, aperos de labranza, jarapas... y como pieza estrella la sartén de campaña que el escritor accitano usó durante la guerra de África. 

Obligado visitar las plazas del Tilo y del Calvario, donde se levanta una escultura en granito de un toro de Guisando, donada por la Diputación de Ávila. 

El barrio alto a lo largo de la carretera y acoge los establecimientos turísticos, numerosos bares y restaurantes. El pueblo termina, pero la carretera sigue subiendo, asfaltada y después, como pista de tierra hasta al Hoya del Portillo, último lugar donde podemos dejar el coche y comenzar las muchas rutas posibles por la Sierra. Aconsejamos las vistas que desde sus miradores pueden disfrutarse sobre la totalidad del barranco del Poqueria y las vecinas Sierras de Lújar y la Contraviesa. 

Mirador del Tajo del Diablo, sobre la vertical de Pampaneria. 

Mirador del Perchel, con su típica obra alpujarreña. 

Mirador de la Junta de los Ríos, el más impresionante, situado en el extremo sur de la vertiente izquierda del barranco, en el punto en que la carretera de Trevélez abandona la antigua taha de Pocaira para adentrase ya en la de Ferreira.
 
Capileira es el paraíso de los montañeros y excursionistas de todo tipo y preparación. Entre sus rutas están: 

La subida al poblado de la Cebadilla, a la central eléctrica del Poqueira. 

Sendero del Toril 

Recorrido por las acequias altas. 

En Capileira tenemos también el Centro de Interpretación de las Altas Cumbres, lugar donde se puede coger el autobús que en poco más de una hora te sube hasta la Hoya del Portilloy el Mirador de Treveléz. Desde ahí, son nuestros pies los que nos impulsan bien hacia el refugio del Poqueira, La Caldera, El Mulhacén o 7 Lagunas por citar alguna de las rutas emblemáticas. 

GASTRONOMÍA: 

Migas alpujarreñas, el choto capilurrio, el plato alpujarreño con papas a lo pobre, el jamón y huevos, las gachas pimentonas, lla sopa alpujarreña con almendras picadas, el puchero de berza, el jabalí en salsa, las truchas con almendras o el lomo de orza. 
Cualquier restaurante de Capileira es digno para probar su gastronomía típica, como el plato alpujarreño, pero un lugar que no te decepcionará, por su calidad y trato es el Restaurante la Pizzería, con sus excelente pizza elaborada con chacinas de la región o su ensalada griega, y al final un digestivo de pacharán con endrinas de Sierra Nevada que Antonio, ofrece gentilmente a sus clientes , justo enfrente de la parroquia. 

Teléfonos de interés: 

Refugio del Poqueira 958 343 349 

Centro de Interpretación Altas Cumbres 958 763 486